Cátedra de la Paz

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miércoles, 16 de julio de 2025

LA CELEBRACIÓN DE LA VIRGEN DEL CARMEN EN LOS CUROS

 

La devoción a la Virgen del Carmen es una de las expresiones religiosas más profundas y arraigadas del pueblo venezolano, y en Los Curos, parroquia Osuna Rodríguez del municipio Libertador del estado Mérida (Venezuela), esta tradición ha cobrado una fuerza especial gracias a la fe y organización de los transportistas que, año tras año, se convierten en protagonistas de una de las celebraciones más sentidas por la comunidad: la fiesta en honor a su patrona, la Virgen del Carmen.

Una celebración que une al pueblo

Cada 16 de julio, desde muy temprano en la mañana, el aire de Los Curos se llena de un ambiente de fiesta, esperanza y espiritualidad.

En las calles comienza a sentirse la emoción de lo que ya se ha convertido en una tradición emblemática de este sector popular merideño. La jornada inicia con la caravana de los transportistas —choferes de busetas, taxis y mototaxis— quienes recorren las calles de Los Curos con sus unidades engalanadas de globos blancos y amarillos, colores que representan la pureza y la luz divina.

Esta caravana no es solo un desfile de vehículos, es un acto de fe sobre ruedas. Los conductores, muchos de ellos herederos de esta tradición que inició hace más de dos décadas, hacen sonar sus cornetas no como gesto de tráfico, sino como señal de júbilo, como plegaria al cielo para pedir a la Virgen su protección en cada jornada de trabajo, en cada ruta cargada de pasajeros, en cada regreso al hogar.

La caravana, a su paso, contagia de alegría a toda la comunidad. Desde las aceras, ventanas y esquinas, vecinos saludan, las bocinas suenan o simplemente observan con admiración el fervor popular de quienes han convertido el volante en un altar de devoción. Es una celebración de pueblo, hecha desde el corazón de su gente trabajadora.

Misa solemne: el alma de la festividad

El momento central de la jornada llega con la misa solemne en honor a la Virgen del Carmen, organizada y promovida por las diferentes asociaciones de transporte del sector.

En la Iglesia Corazón de María de Los Curos, según el año y las condiciones, se congregan decenas de transportistas junto a sus familias, así como vecinos y devotos que hacen vida en Los Curos.

La imagen de la Virgen, muchas veces colocada en un altar especialmente decorado, preside la ceremonia. Durante la homilía, el sacerdote suele resaltar el papel de los transportistas como trabajadores esenciales que llevan la carga del día a día sobre ruedas, y eleva una oración por quienes han perdido la vida en las vías, recordando que cada volante que se toma debe hacerse con prudencia y encomendándose a Dios.

La misa no solo reafirma la fe de los presentes, sino que también fortalece los lazos comunitarios. Es común que, al finalizar, los choferes compartan un gesto de hermandad: un abrazo, una oración conjunta o incluso una pequeña celebración con música criolla, café caliente y panes dulces ofrecidos por vecinos colaboradores.

Orgullo curoseño

Esta tradición no solo embellece las calles del sector con color y alegría, también alimenta el sentido de pertenencia y orgullo entre sus habitantes.

Para muchos, ver pasar la caravana es rememorar a sus padres, abuelos o hermanos que alguna vez fueron choferes o mototaxistas. Para otros, es una muestra viva de que la fe sigue siendo motor y guía de la vida comunitaria.

En un tiempo donde tantas expresiones culturales se pierden o diluyen, la fiesta de la Virgen del Carmen en Los Curos se mantiene firme, gracias a la voluntad colectiva de un pueblo que no se rinde.

La Asociación de Transporte de Los Curos, las cooperativas, los grupos familiares y vecinos que cada año se suman, son los guardianes de esta herencia viva que, más allá del culto religioso, expresa el alma misma de Los Curos: trabajadora, solidaria y profundamente creyente.

Celebrar a la Virgen del Carmen no es solo una tradición; es un acto de resistencia espiritual, de identidad cultural y de profundo amor por el barrio y por la vida.

Desde el corazón de la Gente de Los Curos, esta celebración se alza como un canto a la esperanza, un homenaje a quienes ruedan por las calles llevando a cuestas la dignidad del trabajo y la fe de un pueblo que no olvida de dónde viene ni hacia dónde va. Waltrejo/Ciberpaz/conIA

 


miércoles, 2 de julio de 2025

Arreglos de los parques y canchas en Los Curos

 

La alegría volvió a correr por los parques y canchas de Los Curos en mayo de 2025, cuando junto al asfaltado de la avenida principal, se iniciaron las obras de recuperación y embellecimiento de los espacios recreativos de esta populosa comunidad merideña.

Durante años, los parques de los distintos sectores habían estado sumidos en el deterioro: columpios oxidados, cercas dañadas, bancos quebrados y canchas deportivas despintadas y sin iluminación. Pero con la llegada del nuevo gobernador del estado Mérida, Arnaldo Sánchez, y cumpliendo su promesa de atender las necesidades reales de su antigua parroquia, comenzó una transformación que ya se deja ver y sentir en el corazón de la comunidad.

Simultáneamente con las labores de pavimentación de la arteria vial que conecta toda la parroquia, cuadrillas del gobierno regional se desplegaron para atender los parques infantiles, muchos de ellos ubicados cerca de las escuelas y urbanizaciones como la parte baja y media de Los Curos.

Los trabajos incluyeron la reparación de cercas, la instalación de nuevos columpios y sube y bajas, el pintado de bancos, la colocación de plantas ornamentales y el embellecimiento con murales coloridos y frases de aliento. En cada parque se restauró el área de juegos con colores vivos y señalización apropiada para el disfrute seguro de los más pequeños.

Gabriela, de 9 años, sonriente mientras se columpiaba junto a sus amigos, expresó con entusiasmo: Ahora sí me gusta venir todos los días. Antes me daba miedo porque los columpios estaban viejos y rotos, pero ahora están como nuevos. ¡Pintaron hasta las flores en las paredes!

A su lado, Daniel, de 10 años, que jugaba fútbol con una pelota nueva, dijo mientras sudaba alegría: Lo mejor fue que pintaron la cancha donde jugamos y pusieron una frase que dice “Gente que resuelve”. ¡Es verdad! Porque arreglaron todo lo que estaba feo desde hace tiempo.

Las canchas deportivas, otro de los espacios vitales para la recreación y el encuentro comunitario, también fueron intervenidas. Se repararon sus pisos con pintura multicolor, se marcaron correctamente sus líneas de juego, se colocaron tableros de baloncesto nuevos y mallas para fútbol y voleibol.

En cada una, al terminar los trabajos, fue colocado un mensaje visible: Arnaldo Sánchez, Gobernador de Mérida – Gente que resuelve…”, como sello de gestión visible y recordatorio del cumplimiento de su promesa electoral con el pueblo que lo vio crecer.

Doña Marina, de 67 años, vecina de la parte baja de Los Curos, emocionada mientras veía jugar a sus nietos, expresó con sinceridad: Uno creía que nadie se iba a acordar de estos parques. Llevaban años sin arreglar, pero ahora sí se puede venir a pasar la tarde, sentarse en los bancos sin miedo a que se partan. Estoy contenta y agradecida.

De igual manera, don Eliseo, de 72 años, habitual caminante de las mañanas por la avenida principal, dijo mientras observaba los jardines recién sembrados: Cuando uno ve estas cosas bien hechas, le dan ganas de seguir cuidando. Es como si le lavaran la cara a Los Curos. Yo camino mejor ahora, con menos huecos y más alegría por los chamos que otra vez juegan como antes.

Estos arreglos no solo embellecieron los espacios, sino que reactivaron la vida comunitaria en torno al juego, la convivencia, la práctica deportiva y el encuentro intergeneracional. La comunidad volvió a apropiarse de sus parques y canchas, no solo como lugares para distraerse, sino como espacios seguros, limpios y dignos.

Los Curos, territorio de luchas, sueños y esperanza, vuelven a respirar colores y risas, demostrando que cuando se gobierna con sentido de pertenencia y acción efectiva, la transformación es posible.

La gente ahora mira con ilusión la posibilidad de que otros espacios también sean atendidos, manteniendo viva la consigna que pintaron en los muros y que ya se escucha en cada rincón: “Gente que resuelve… y que cumple con su palabra”. Ciberpaz/conIA

 


martes, 1 de julio de 2025

La vocación muralista de la gente de Los Curos.

 

Los Curos, parroquia popular y vibrante ubicada en la parroquia civil Osuna Rodríguez del municipio Libertador del estado Mérida, ha sido, por décadas, un verdadero semillero de expresiones juveniles, culturales y comunitarias.

Entre esas manifestaciones, destaca con fuerza su profunda vocación muralista, una tradición que ha dejado huellas de colores, consignas, sueños y luchas plasmadas en las paredes que bordean esta comunidad andina.

En especial, las paredes de la Industria GAMA, justo en la entrada a Los Curos, han sido desde hace más de cuarenta años el lienzo urbano preferido de generaciones de jóvenes, convirtiéndose en referencia viva del arte comunitario en Mérida.

Durante los años ochenta, fue el Movimiento Juvenil ANCLA quien se apropió de esos muros, transformando la grisura del concreto en un espejo de esperanzas juveniles. Pintaban murales con mensajes de vida, fe, denuncia y participación. Así como también lo hacían en otras paredes de sectores como la parte Alta, Media o Negro Primero.

En esos años, el muralismo era más que una expresión artística: era una toma simbólica del espacio público, una forma de decir “aquí estamos” y una herramienta para educar desde el color. Cada mural se gestaba en colectivo, con brochas prestadas, pintura conseguida con esfuerzo y mucha pasión.

A partir de los años noventa, esta tradición fue retomada con fuerza por la Asociación Civil Cátedra de la Paz y Derechos Humanos Mons. Oscar Arnulfo Romero, que junto a diversos grupos juveniles organizados entre 1990 y 2000 —como la Coordinadora de Grupos, Soldedi, EGUM, Grupo de Montañismo de Los Curos, CERCUS, los grupos religiosos, entre otros— hizo de los murales no solo una expresión cultural, sino un acto pedagógico y político en el mejor sentido: educar para la paz, visibilizar los derechos humanos y sembrar conciencia crítica en la comunidad. Los murales se realizaban con jornadas colectivas que incluían conversatorios, limpieza de espacios y festivales barriales.

Walter Trejo Urquiola, actual coordinador general de la Cátedra de la Paz, recuerda con especial claridad una experiencia de 1989. En medio de una jornada muralista en las paredes de GAMA, dirigentes políticos locales de entonces intentaron obligarlos a detener la pintura para colocar propaganda partidista. Al negarse a ceder ese espacio, tradicionalmente ocupado por los jóvenes de la comunidad, fueron amenazados verbalmente, generando tensión y preocupación.

Sin embargo, la comunidad respaldó a los muralistas, y el hecho fue reseñado por el Diario Frontera, lo que permitió visibilizar el conflicto y reafirmar la legitimidad de ese muro como espacio juvenil y comunitario. Ese incidente fortaleció el compromiso de los jóvenes, quienes comprendieron que pintar murales era también un acto de resistencia y dignidad.

Con la llegada del nuevo milenio, y ya entrada la década del 2000, las circunstancias comenzaron a cambiar. Los altos costos de la pintura, la falta de apoyo gubernamental sostenido a estas expresiones artísticas comunitarias, y la transformación de las dinámicas juveniles en Los Curos hicieron que muchos de esos grupos se disolvieran o cambiaran de rumbo.

Fue entonces cuando las organizaciones comunales comenzaron a hacer uso del mismo muro, esta vez para plasmar mensajes alusivos a las misiones sociales impulsadas por el gobierno nacional y consignas de la denominada Revolución Bonita. Así, los murales pasaron de ser lienzos juveniles independientes a convertirse en espacios de comunicación política con el proceso bolivariano.

Sin embargo, más allá de los cambios de contenido o de manos que han pintado los murales, la vocación muralista sigue viva en la memoria colectiva de Los Curos.

Esa pared de GAMA, testigo silente de las luchas, alegrías y visiones de comunidad, continúa siendo un símbolo de identidad. Para muchos, recuperar esa vocación muralista juvenil, con apoyo institucional y comunitario, es una deuda pendiente.

Porque Los Curos no solo se cuenta con palabras, sino también con colores, pinceles y murales que han hecho de sus calles una galería de luchas compartidas. Ciberpaz/conIA

 


lunes, 30 de junio de 2025

Asfaltado de la Avenida Principal de Los Curos

 

Después de muchos años de abandono, deterioro vial y promesas incumplidas, el pasado 25 de mayo de 2025 marcó un antes y un después para la comunidad de Los Curos, una de las parroquias más numerosas y populares de la ciudad de Mérida.

En esa fecha, comenzó el asfaltado integral de la avenida principal, una obra largamente esperada por miles de habitantes que diariamente transitan por esa vía fundamental para la movilidad, el comercio y la vida cotidiana de este extenso sector ubicado en la parroquia civil Osuna Rodríguez del municipio Libertador del estado Mérida, Venezuela.

La rehabilitación de la vía fue uno de los compromisos más reiterados durante la campaña electoral por el ahora gobernador del estado Mérida, Arnaldo Sánchez, quien con profunda convicción y conocimiento del territorio aseguró que, de resultar electo, ejecutaría el asfaltado completo de la avenida.

No era una promesa vacía: el hoy mandatario regional vivió durante muchos años en la parte alta de Los Curos, por lo que conoce de primera mano el impacto que tenía para sus habitantes el transitar a diario por una arteria vial repleta de huecos, hundimientos, baches y sin mantenimiento adecuado desde hace más de una década.

Una vez conocida su victoria electoral, el gobernador Sánchez no tardó en actuar. Las máquinas y cuadrillas comenzaron a desplegarse desde la entrada a Los Curos por la vía hacia El Salado, iniciando las labores de fresado, nivelación, recuperación de la carpeta asfáltica y finalmente el vaciado del nuevo asfalto.

Durante pocas semanas, los vecinos observaron cómo la deteriorada avenida principal comenzaba a transformarse, generando comentarios positivos y muestras de gratitud por parte de comerciantes, conductores y peatones.

La obra no solo incluyó la colocación de una capa de asfalto nueva de alta resistencia, sino también la señalización completa de la vía, el rayado central y lateral, la delimitación de los bordes, la instalación de reductores de velocidad —conocidos popularmente como "policías acostados"— y la colocación de señaléticas nuevas que mejoran tanto la visibilidad como la seguridad vial.

El proyecto abarcó hasta el final de la avenida principal, a la altura de la sede de la Cámara de Comercio del estado Mérida, dejando en condiciones óptimas este importante eje vial que conecta a varias comunidades, escuelas, centros de salud y comercios del sector.

Los comentarios de los habitantes no se hicieron esperar. Muchos destacaron el cumplimiento de la palabra empeñada por el gobernador, agradeciendo el impacto positivo que esta intervención tiene en la cotidianidad de niños, adultos mayores, motorizados, transportistas y transeúntes. Otros, con justa razón, señalaron que la obra debe continuar en una segunda etapa, que abarque las calles paralelas y transversales a la avenida principal, donde aún persisten tramos sin asfaltar, con fallas de borde y sin iluminación.

Para la Gente de Los Curos, este asfaltado no es solo una mejora vial; representa una reivindicación social, un acto de justicia territorial tras años de desatención por parte de gobiernos municipales anteriores.

La recuperación de esta arteria vial no solo facilita el tránsito y mejora el acceso al transporte público, sino que dignifica a una comunidad trabajadora, solidaria y activa que sigue apostando por el progreso y la transformación de su entorno.

La esperanza está viva, y la comunidad mantiene la mirada atenta, esperando que esta primera gran obra sea el inicio de muchas otras que respondan a las verdaderas necesidades de Los Curos. Ciberpaz/conIA

 


domingo, 29 de junio de 2025

Acto Cultural homenaje a la Virgen Inmaculado Corazón de María en Los Curos.

 El pasado 24 de junio 2025, en un ambiente colmado de fervor, tradición y alegría popular, se celebró con entusiasmo el acto cultural en homenaje a la Virgen Inmaculado Corazón de María, patrona espiritual de la parroquia eclesiástica Corazón de María, ubicada en la populosa comunidad de Los Curos, parroquia civil Osuna Rodríguez del municipio Libertador del estado Mérida, Venezuela.

Esta emotiva actividad fue organizada por la Comisión de Justicia y Paz de la parroquia, integrada por laicos comprometidos y organizaciones comunitarias, entre ellas la Asociación Civil Cátedra de la Paz y Derechos Humanos Mons. Oscar Arnulfo Romero, con el propósito de rendir tributo a la Virgen en el marco de su festividad litúrgica, fortaleciendo los lazos de fe, identidad cultural y participación comunitaria en el marco de las Fiestas Patronales de dicha parroquia católica.

El templo parroquial se vistió de fiesta para recibir a los feligreses, quienes acudieron con entusiasmo a compartir esta jornada de fe y cultura.

El acto comenzó con la presentación del Grupo de Danzas Andinas, dirigido por la profesora Hilda Rojas, en una propuesta artística que conmovió a los presentes. Las danzas estuvieron dedicadas a San Juan Bautista, coincidiendo con la fecha de su solemnidad (24 de junio), y llenaron el recinto de colorido, ritmo ancestral y tradición.

Las jóvenes bailarinas y bailarines, ataviados con trajes típicos, ejecutaron piezas que evocaban los cantos y movimientos del folclore andino, especialmente los que se celebran en los pueblos venezolanos en honor a San Juan, patrono de los ritmos afrodescendientes y símbolo de alegría espiritual. La interpretación fue aplaudida con entusiasmo por los asistentes, quienes vieron en esa danza una expresión de agradecimiento y esperanza colectiva.

Posteriormente, el acto continuó con la presentación de diez niños y niñas pertenecientes a las clases de cuatro que se imparten en la comunidad bajo la dirección de la destacada musicóloga merideña Yoly Soto.

Con talento y entusiasmo, los pequeños músicos interpretaron un repertorio de piezas populares dedicadas a la Virgen, así como melodías tradicionales venezolanas.

Su participación fue recibida con aplausos y emoción, especialmente por padres, madres y familiares presentes en el recinto, quienes valoraron el esfuerzo de formación musical que se viene promoviendo en Los Curos como una herramienta de paz, inclusión y construcción de ciudadanía.

Las cuerdas del cuatro, ejecutadas por manos infantiles, resonaron con dulzura en la nave central del templo, transformando el espacio en un escenario donde la devoción y el arte se abrazaron.

Este homenaje cultural no solo honró a la Virgen Inmaculado Corazón de María, sino que también puso de relieve la importancia del trabajo en red entre iglesia, comunidad organizada y laicos comprometidos.

Fue un acto que conjugó espiritualidad, identidad cultural y compromiso social, reafirmando a Los Curos como un territorio de paz, expresión artística y profundo sentido comunitario.

La jornada culminó entre abrazos, fotografías, y palabras de agradecimiento por parte del párroco y de los organizadores, quienes destacaron el rol vital de la cultura como puente para evangelizar, formar y unir corazones en torno a la Virgen María que protege y guía a esta parroquia viva de Mérida. Ciberpaz/conIA



sábado, 28 de junio de 2025

Misa de la Novena a la Virgen Inmaculado Corazón de María en Los Curos.

 

En la tarde del lunes 24 de junio, coincidiendo con la celebración litúrgica del nacimiento de San Juan Bautista, la comunidad de la parroquia Corazón de María en Los Curos vivió con profunda devoción y alegría la sexta misa de la novena en honor al Inmaculado Corazón de María, patrona de esta parroquia confiada a los padres Claretianos y corazón espiritual de este sector popular de la ciudad de Mérida.

La Eucaristía fue organizada con esmero por la Comisión de Justicia y Paz, un espacio de articulación que reúne a laicos comprometidos y organizaciones comunitarias como la Asociación Civil Cátedra de la Paz y Derechos Humanos Mons. Oscar Arnulfo Romero, quienes impulsan desde la fe y la acción social una cultura de paz y esperanza en la zona.

La celebración inició con una monición de entrada a cargo de una integrante de la Comisión, quien con palabras sencillas y sentidas, invitó a los fieles a prepararse espiritualmente para este encuentro con Dios, motivando la participación activa y consciente de la comunidad. Su mensaje destacó el valor de la oración, el compromiso cristiano con la justicia, y el amor al prójimo como caminos verdaderos para cultivar el corazón mariano de cada persona. En un templo lleno de fieles, familias y niños, se percibía un ambiente de recogimiento y fervor que contrastaba con la alegría popular que caracteriza al día de San Juan, enriqueciendo así la dimensión espiritual de la jornada.

Las lecturas bíblicas del día, centradas en el relato del nacimiento de San Juan y el papel de su madre Isabel, tocaron con fuerza el corazón de los asistentes. El Evangelio narró el momento en que Isabel, llena de fe y obediencia, nombra a su hijo como Juan, en contra de lo esperado por su entorno. Esta historia permitió al celebrante resaltar la importancia de la vocación, el valor de escuchar a Dios y de asumir los desafíos de la vida con fidelidad y confianza. La homilía profundizó en el testimonio de Juan como profeta, como voz que clama en el desierto y como modelo de coherencia, invitando a la comunidad a ser luz y esperanza en medio de las dificultades.

Durante la liturgia, Walter Trejo Urquiola, representante de la Cátedra de la Paz, fue el encargado de dar lectura a la oración del sexto día de la novena al Inmaculado Corazón de María. Con voz pausada y solemne, guió a los presentes en una súplica colectiva cargada de fe, esperanza y gratitud por las bendiciones recibidas.

Esta oración mariana, cuidadosamente adaptada al espíritu de la jornada, evocó a María como madre que cuida, acompaña y fortalece a su pueblo en medio de las luchas cotidianas. Fue un momento de profunda espiritualidad comunitaria, en el que las lágrimas, el silencio reverente y el murmullo de las plegarias se fundieron en una sola voz.

La misa culminó con la bendición final del párroco, quien agradeció la presencia de todas y todos los participantes, reconociendo especialmente el trabajo articulado de la Comisión de Justicia y Paz, y de las organizaciones comunitarias presentes.

Antes de finalizar, hizo una invitación especial para asistir al acto cultural que se realizaría en honor a la Virgen, preparado con cariño por agrupaciones locales como el Grupo de Danzas Andinas y los niños y niñas de la escuela de cuatro.

La sexta misa de la novena no solo fue un acto litúrgico, sino un signo claro del compromiso de esta parroquia con la fe viva, la organización comunitaria y la construcción de una paz arraigada en la justicia, el arte y la espiritualidad mariana. Fue, sin duda, una jornada que quedará grabada en los corazones de quienes participaron como un testimonio de que, aun en tiempos difíciles, la esperanza florece cuando se cultiva desde el corazón. Ciberpaz/conIA



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lunes, 16 de junio de 2025

Ciencia con Propósito Comunitario en Los Curos.

 

El Complejo Educativo Aristóbulo Istúriz Almeida, ubicado en la comunidad de Los Curos, parroquia civil Osuna Rodríguez del municipio Libertador del estado Mérida (Venezuela), ha reafirmado durante el año escolar 2024-2025 su compromiso con una formación integral para sus estudiantes, al promover actividades científicas con enfoque social y comunitario a través de una pedagogía activa y transformadora, el plantel ha creado espacios donde la ciencia se convierte en herramienta de cambio, reflexión y acción colectiva.

Una de las experiencias más significativas fue la Demostración de Trabajos Científicos Sociocomunitarios realizada por los estudiantes del quinto año el pasado 2 de junio de 2025, en la cual se presentaron proyectos originales orientados a responder problemáticas locales desde un enfoque científico y con sentido humano.

Jóvenes científicos comprometidos con su entorno

La jornada del 2 de junio reunió a docentes, estudiantes, representantes y miembros de la comunidad para apreciar una muestra del talento, la creatividad y el compromiso de las y los estudiantes de quinto año. Los trabajos científicos sociocomunitarios abarcaron áreas como el ambiente, la salud pública, la alimentación, la energía, la seguridad comunitaria y la educación ambiental, todos desarrollados desde una perspectiva territorial y participativa.

Estos proyectos no solo demostraron dominio de conceptos científicos, sino también una sensibilidad social que revela la importancia de formar estudiantes con conciencia ciudadana.

Las propuestas incluyeron soluciones prácticas y viables a problemas concretos de la comunidad de Los Curos, integrando el conocimiento adquirido en el aula con el saber popular y la realidad del entorno.

Docentes que impulsan la Ciencia Comunitaria

Este logro ha sido posible gracias al esfuerzo sostenido del equipo docente del Complejo Educativo Aristóbulo Istúriz Almeida, quienes han asumido con vocación su rol como promotores de la Ciencia Comunitaria: una forma de enseñar y aprender que conecta la ciencia con la vida diaria, con las luchas locales y con la esperanza de transformación social.

La planificación académica ha estado guiada por un enfoque pedagógico centrado en el protagonismo estudiantil, el aprendizaje significativo y la vinculación escuela-comunidad. En este sentido, la demostración de trabajos no fue una actividad aislada, sino el resultado de meses de investigación, trabajo colaborativo y acompañamiento constante.

Impacto formativo más allá del aula

Para los y las estudiantes, participar en estas actividades científicas ha representado una experiencia formativa profunda. No solo han desarrollado habilidades de investigación, redacción, exposición oral y pensamiento crítico, sino que también han fortalecido su sentido de pertenencia, solidaridad y compromiso con su comunidad.

Asimismo, la experiencia ha permitido tender puentes entre la escuela y otros actores sociales del territorio, demostrando que el conocimiento científico puede ser motor de desarrollo local y diálogo intergeneracional.

Rumbo a una cultura educativa transformadora

Las actividades científicas promovidas por el Complejo Educativo Aristóbulo Istúriz Almeida marcan un camino hacia una cultura educativa transformadora, donde la ciencia deja de ser una materia abstracta para convertirse en una herramienta viva, situada y transformadora. La visión de futuro que aquí se construye se basa en la formación de ciudadanos críticos, participativos y comprometidos con su realidad.

Iniciativas como esta fortalecen el tejido educativo y comunitario de Los Curos, y dan testimonio del valor que tiene una educación pública de calidad, capaz de empoderar a las nuevas generaciones y de sembrar esperanza en tiempos de desafíos. Ciberpaz/conIA

 


sábado, 14 de junio de 2025

Fortaleciendo la Identidad Cultural en Los Curos.

 

Durante el año escolar 2024-2025, la Coordinación de Comunidades Educativas, a través de su delegada en Los Curos, la profesora Hilda Rojas, ha venido desempeñando un papel fundamental en la promoción de actividades culturales en el Circuito Educativo N° 18 de la Parroquia Civil Osuna Rodríguez, municipio Libertador del estado Mérida.

Desde la Comisión de Cultura de las instituciones educativas que conforman este circuito, se ha impulsado una agenda de acciones significativas orientadas a reforzar la identidad cultural local, el sentido de pertenencia y el protagonismo estudiantil en la vida comunitaria.

Entre las iniciativas más destacadas se encuentra el Taller de Joropo Andino, una propuesta formativa que ha generado entusiasmo y participación activa tanto en docentes como en estudiantes. Este taller, que forma parte del camino hacia la edición del Joropazo Escolar 2025, ha sido una verdadera escuela de tradiciones, valores y encuentro intergeneracional.

El Joropo Andino: Una Danza que Une y Educa

La realización del Taller de Joropo Andino ha tenido como propósito principal fomentar el aprendizaje, la práctica y la difusión de esta manifestación tradicional propia de la región andina venezolana. Bajo la guía de cultores locales y con el acompañamiento de la profesora Hilda Rojas, docentes y estudiantes de las escuelas del circuito han aprendido no solo los pasos característicos de la danza, sino también su historia, su valor simbólico y su rol en la preservación del patrimonio cultural inmaterial.

El taller ha sido desarrollado con una metodología participativa e integradora, permitiendo que niñas, niños y adolescentes no solo se formen como bailarines, sino también como multiplicadores culturales dentro de sus comunidades escolares. Esta acción formativa ha servido como un espacio de construcción colectiva de identidad y como plataforma para fortalecer el tejido comunitario.

Cultura y Educación como Camino para la Paz

La participación en actividades como el Joropazo Escolar no se limita al espectáculo. Representa una vivencia que transforma la manera en que las y los estudiantes se relacionan con su entorno, con sus raíces y con sus pares. La Comisión de Cultura del Circuito Educativo N° 18 ha demostrado que, cuando la educación se articula con el arte y la cultura, se crean oportunidades para sembrar paz, autoestima, respeto y cooperación.

Gracias al trabajo comprometido de la profesora Hilda Rojas, se ha generado un renovado interés por parte de las instituciones educativas en mantener viva la cultura popular andina. Cada ensayo, cada clase de joropo, cada presentación se ha convertido en una herramienta pedagógica para educar en valores, para cultivar la sensibilidad artística y para fortalecer la cohesión social.

Un Legado que Inspira

El impacto de estas actividades culturales se ha evidenciado en el entusiasmo de los jóvenes estudiantes, quienes han encontrado en el joropo una forma de expresión, pertenencia y alegría. El esfuerzo conjunto entre escuelas, familias, cultores y comunidad educativa ha logrado tejer una red de apoyo y continuidad que asegura el éxito de las futuras ediciones del Joropazo Escolar.

Este trabajo ejemplar, liderado por la Coordinación de Comunidades Educativas y encarnado por la profesora Hilda Rojas, nos recuerda que el alma de la educación no está solo en los contenidos académicos, sino también en la capacidad de hacer de nuestras tradiciones una herramienta para el desarrollo humano y comunitario. CIBERPAZ/conIA

 


jueves, 12 de junio de 2025

Comisión de Justicia y Paz: compromiso y cultura viva en Los Curos

 

En la Parroquia Corazón de María de Los Curos, ubicada en la Parroquia Civil Osuna Rodríguez del municipio Libertador del estado Mérida, Venezuela, la labor de la Comisión de Justicia y Paz de los Padres Claretianos se ha convertido en una referencia viva de espiritualidad comprometida con la comunidad.

Inspirados en el carisma claretiano, estos hombres y mujeres impulsan una fe que no se queda en el templo, sino que sale al encuentro de las realidades del pueblo, con una clara opción por la justicia, la paz, los derechos humanos y la cultura.

Durante años, la Comisión Justicia y Paz ha promovido acciones pastorales orientadas a fortalecer los valores de solidaridad, convivencia pacífica y servicio, especialmente en contextos donde las necesidades materiales y espirituales son profundas.

En Los Curos, su presencia ha significado acompañamiento a los más vulnerables, formación en derechos humanos, promoción de actividades culturales y, sobre todo, el cultivo de una espiritualidad encarnada y liberadora.

La novena a María: expresión de fe y esperanza comunitaria

Este mes de junio 2025, la Comisión de Justicia y Paz local ha asumido con entusiasmo ser parte de la organización de la tradicional Novena a la Virgen María, que tendrá un acto central el próximo 28 de junio.

Sin embargo, tendrá a su cargo el 24 de junio en el día de San Juan Bautista, la novena correspondiente a ese día. Esta fecha, cargada de profunda espiritualidad y tradición popular, se vivirá como una verdadera fiesta de fe, identidad cultural y encuentro comunitario.

El programa contempla, en primer lugar, el rezo del Santo Rosario, guiado por los distintos grupos religiosos, catequistas, servidores de la parroquia y fieles devotos.

Esta oración común, que une a generaciones en torno al misterio de María, será el preludio de la misa solemne presidida por el párroco de la comunidad, un momento de profundo recogimiento que recordará también la figura de San Juan Bautista como profeta de esperanza y justicia.

Uno de los momentos más esperados será la intervención dancística alusiva al Baile de San Juan, una manifestación que conecta lo religioso con lo cultural, dando visibilidad a las raíces afrovenezolanas y populares que conforman la identidad del pueblo. Esta expresión artística nos recuerda que la fe también se celebra con el cuerpo, la música y el movimiento y estará a cargo por el grupo de Danzas Andinas, dirigido por la profesora Hilda Rojas.

Cultura y comunidad: el cuatro como símbolo de encuentro

La jornada culminará con un acto cultural muy especial, en el que el protagonismo lo tendrán niños y niñas que se forman en el manejo del cuatro, instrumento nacional por excelencia. Bajo la orientación de la profesora Yoly Vargas destacada promotora cultural de la comunidad de Los Curos, los pequeños ofrecerán un repertorio de música venezolana que exaltará los valores de identidad, tradición y pertenencia.

Esta iniciativa no solo es una actividad recreativa; es una verdadera apuesta por la formación integral de las nuevas generaciones, quienes encuentran en la música un canal de expresión, disciplina, arte y vínculo comunitario. En tiempos donde la esperanza parece frágil, estas acciones demuestran que el tejido social puede fortalecerse desde la fe, la cultura y la participación activa.

Al finalizar la jornada, la Comisión Justicia y Paz ofrecerá un compartir comunitario, como signo de fraternidad, unidad y alegría. Esta sencilla pero significativa acción representa la comunión que se construye en lo cotidiano, en el servicio y en la celebración compartida de la vida.

Una paz que se construye desde abajo

La labor de la Comisión de Justicia y Paz en Los Curos es un ejemplo de cómo es posible encarnar los valores del Evangelio en medio de las dificultades. Con un enfoque centrado en la dignidad humana, el respeto a los derechos fundamentales, el trabajo en red con otras organizaciones comunitarias y la promoción de la cultura de paz, su acción pastoral es hoy más necesaria que nunca.

Desde la parroquia claretiana, este equipo sigue creyendo y apostando por una iglesia en salida, como pide el Papa Francisco: una iglesia que se hace vecina, que escucha, que acompaña, que educa y que transforma.

La Comisión Justicia y Paz en Los Curos, no solo integra a laicos comprometidos sino que ha permitido la participación de organizaciones comunitarias como Cátedra de la Paz y Derechos Humanos Mons. Oscar A. Romero, Jardín de la Esperanza, Comedor Blas Márquez.

En Los Curos, la Comisión de Justicia y Paz no solo celebra la fe, la hace vida en cada rostro, en cada niño y niña que canta con su cuatro, en cada anciano que reza con devoción, en cada joven que baila con esperanza.

Que esta jornada del 24 de junio sea no solo una fiesta, sino también un recordatorio de que la paz se construye con justicia, con ternura, con cultura y con compromiso.

¡Feliz día de San Juan Bautista! ¡Que María nos siga guiando por caminos de justicia y paz!